A lo largo de mi vida no he dejado de salir un solo año en la Tamborrada. El día de San Sebastián lo siento como si fuese mío y siempre lo he disfrutado mucho. Tengo una familia que son donostiarras por los cuatro costados y mientras a mi madre nunca le ha gustado esta fiesta, mi padre es socio fundador de La Esperanza. Él ha vivido muchísimo
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión